En busca de un método alternativo de tratamiento para la reducción de arrugas en la piel, la pareja de Martin Holzlehner de Hanover, Alemania, le pidió facilitarla un equipo láser de alto rendimiento para su consulta. Acto seguido, Holzlehner desarrolló el primer Vitalaser VL300 que hizo posible realizar un rejuvenecimiento efectivo de la piel sin cirugía invasiva.
En el curso de los primeros tratamientos de prueba, habían algunos asuntos con los compuestos de ácido hialurónico obtenibles en el mercado. Por motivo de los aditivos, causaban alergias y irritaciones cutáneas bajo radiación.
Después de más investigación, Martin Holzlehner logró desarrollar un procedimiento especial que es único en el mundo. Por medio de deshidratación y micronización es posible infiltrar geles biológicamente activos de acido hilaurónico en la profundidad de la piel.
Estos geles se elaboran bajo condiciones de esterilidad sin alguna forma de conservantes, emulgentes, ácido de frutas o metales. El resultado es un gel biológico puro de acido hilaurónico. Según pruebas epicutáneas es tan tolerable como agua. En combinación con el Vitalaser conduce a resultados impresionantes en el rejuvenecimiento de la piel.